El apartamento Silbo es un estudio de 37 metros cuadrados en la planta baja con muchísima luz y grandes ventanales que dan al callejón de Bedmar. Preparado para alojar a dos personas, tiene un acogedor altillo, baño con lucernario, cocina independiente totalmente equipada y una sala de estar con comedor que conserva los altísimos techos originales de madera de tea de cuatro metros, los muros de ladrillo visto y las antiguas paredes de piedra caliza blanca. Los suelos son una réplica exacta de los azulejos hidráulicos propios de la época.

Además, este espacio tiene una configuración que permite que se adapte a diferentes usos, como por ejemplo eventos de empresa, encuentros profesionales, presentaciones de productos, ruedas de prensa, talleres, shootings de fotografía, grabaciones audiovisuales o lo que se te ocurra.